Los años no han pasado, y si pasaron
se quedaron anclados en tus manos
habrán pasado doce eternidades,
doce besos dormidos como un sueño,
doce suspiros hondos como mares
hondos como tus ojos y tu vientre,
doce locuras mudas como grutas,
doce gritos de amor enmudecidos
doce... habrán pasado doce eternidades
para perderme al fin en tu morada.
Los años no han pasado, y si pasaron,
se quedaron anclados en tus manos.
Maestra!, neto.
ResponderEliminarSoy Lindy Giacomán MUCHAS GRACIAS POR su publicación no sé quienes son, pero si quieren tener más poesía mía, pueden ir a mi página www.lindygiacomanlapsicomística en FACEBOOK ahí está alguien encargado de publicar todos los días poemas míos y asuntos de la PSICOMÍSITCA que es una psicoespiritualidad SANADORA QUE YO FUNDÉ HACE 50 AÑOS... gracias de nuevo por publicarme, les mando un cariñoso abrazo del Alma. Lindy
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